27 de julio de 2012

Sigo vivo y hablo solo

Exacto, aunque no lo crean, amigos. Como ven, empiezo la entrada hablándoles de "usted" porque llevo tanto tiempo sin escribir que hemos perdido confianza.

Lo cierto es que hace siglos que no cojo el blog y me pongo a escribir y escribir "...a ver que sale..." como hacía cuando empecé y si os digo la verdad, lo echo de menos, porque ha habido infinidad de ocasiones en las que sin nada que hacer me he dicho "Venga, Miguel, no hay nada que hacer, vamos a escribir algo en el blog" (Porque yo cuando hablo solo, lo hago en plural, como si el yo que piensa y el que actúa fueran dos entes distintos y en voz alta, como Smeagol.)
Diréis que es raro lo de hablar solo, lo se, pero nadie me ha visto hacerlo nunca. De hecho os puedo asegurar que nadie me verá nunca hablando solo. ¿Por qué estoy tan seguro? Os lo explicaré, en el momento en el que yo hable y haya alguien mas que yo, ya no estaré solo, así que por mucho que hable... ¡¡NO ESTARÉ SOLO!!

¡¡Hurra!! ¡No estaré solo! No estaré sol...

...

Bah... y es que aunque no lo creáis, estoy escribiendo esto a las 3:00 am, aunque no creo que lo publique según lo acabe, por n razones:

*Digo "n" razones porque voy improvisando y no se cuantas razones voy a dar.

1. Es posible que no la acabe esta noche, puede que me quede dormido mientras o que acabe hasta los cojines de escribir.

2. Antes de publicar algo escrito a estas horas, creo que debo releerlo con la cabeza un poco más despierta (mañana por la mañana).

3. Cuando publico estas cosas suelo anunciarlo en Facebook, Twitter y Tuenti. No me parece una hora adecuada para andar anunciando cosas por ahí, dejaré que durmáis un poco.

No se me ocurren más motivos: n=3


Pues ya que estoy aquí, creo que nunca os he contado el por qué del nombre de esta pequeña parcela mía de internet...

...EXACTO, voy a contaros mi vida, si os molesta os pido mil perdones y os ofrezco un millón de euros por las molestias. Tranquilos, es una historia corta. Tan corta que no merece la pena poner punto y aparte para separarlo del resto del parrafo, tan corta que estoy alargando este párrafo con chorradas para que no quede tan triste...
En un principio solo pretendía hacerme un perfil de blogger con mi cuenta de gmail para seguir publicamente otro blog. Los que os hayáis leído las primeras entradas, escritas sobre papiros, con pinturas rupestres allá por el jurásico (Toma patada a la historia y a la prehistoria), sabréis de cuál estoy hablando: Reflejos de Papel. Aunque ahora lo tienen un poco abandonado ¡Pero oye! No pienso ser yo el que dé lecciones sobre no abandonar blogs. Pues eso, que yo avanzaba con la creación de la cuenta más y más y sin querer ni saber cómo, hice uno.

Os aseguro que no era mi intención, sin embargo ahí estaba... ¡Era mío! ¡Yo lo había creado! Por accidente, si, pero esa era la realidad, él estaba ahí y necesitaba un nombre. Decidí que no lo usaría, que solo era un residuo de hacerme seguidor de Nora y Eileen, por lo que para que nadie se engañara y de pronto un día me viniera en plan "¡¡Oh, dios mío, Pla!! ¡Tienes un blog! ¡A ver cuando escribes algo!" decidí despejar las dudas con el nombre, "Mentira, no tengo un blog". Que sería lo que contestaría yo a la frase anterior.

¿Sorprendidos? ¿A que no esperabais que en principio este blog estuviera destinado a no ser un blog? Menos mal que cambié de idea ¿Eh? Gracias a ello, a día de hoy esta página cuenta con... ¡¡MÁS DE 16 SEGUIDORES!! ¡¡CASI 18!!

En fin... De nada, buenas noches y buena suerte,